Comenzamos nuestra sexta semana de viaje.


Por aquí continuamos con una especie de propina de airmatin, un viento frío que parece que viene del desierto y que cubre todo con una especie de bruma, que en realidad es polvo en suspensión. La temperatura baja, se duerme mejor, pero todo está lleno de polvo y apenas se ve el sol. La pena es que parece que no va a durar.

Ayer nos llegó una noticia que no por esperada dejó de ser una sorpresa. El estado beninés ha impuesto el toque de queda en dos provincias del norte del país, en la zona fronteriza con Burkina Faso y Togo. Están justo al norte de donde nosotros nos encontramos, aunque por aquí la normalidad es total. Os dejo la noticia.
Como habréis visto por las crónicas, este año hemos evitado esa zona del país. No hemos entrado en la Atakora que es la región donde se encuentran esas dos provincias. El marcador rojo está en Materi, la provincia que limita con Togo y Burkina y una de las que se encuentra en toque de queda.

Nos movemos solos por todo el norte del país y cuatro blancos son muchos blancos para pasar desapercibidos. Es mejor evitar la ocasión, aunque nos ha dado pena no visitar Kerou. Afortunadamente sabemos que todo va bien por allí.

Por la mañana, hemos salido hacia Kpatalako, un village en el que financiamos un forage el año pasado. Lo pudisteis ver en la crónica 2022 que enlazaba ayer.
Está en la misma ruta de Awo y de Katoulanga,… solo que bastante más lejos, así que hemos salido pronto.

Nos esperaban a pie de la pista, cantando y bailando,…
Tenían la bomba “envuelta para regalo” y estaban encantados. Se trata de una bomba manual. En esta zona no hay que profundizar tanto como en el Borgou para garantizar agua durante todo el año y por tanto se puede utilizar este tipo de bomba.

Los discursos han discurrido por los temas habituales salvo que, al preguntarles a las mujeres sobre lo que van a hacer con el tiempo que ahorran al tener agua cerca, no han surgido las habituales huertas. El caso es que en esta zona la población suele estar muy dispersa por lo que el ahorro de tiempo es algo relativo.

Lo que sí es sustancial es que la cantidad y sobre todo la calidad del agua es mucho mejor.

Durante los discursos ha surgido también el nombre de un poblado relativamente cercano que carece también de agua potable. Dada la cercanía – menos de cuatro km -, hemos querido acercarnos para ver la situación. Desde el poblado, hemos querido acudir al lugar donde cogen el agua.


Una vez más la realidad ha superado cualquier idea que nos hubiéramos podido hacer. La población de Adogaba acude a un gran cauce estacional llamado Kara. Por el tamaño del cauce, da miedo imaginarse cómo irá en la época de lluvias, pero ahora es un arenal con agujeros hechos por ellos mismos, para poder coger algo de agua.


Pero en este poblado, algunas mujeres ya ha comenzado con las huertas. Junto al cauce hay rastros de otras huertas, con una en marcha, llena del tan apreciado “piment”, el picante local.


Les hemos explicado nuestro esquema de trabajo. Recogemos su petición y la consideraremos junto al resto de las recibidas en estas seis semanas de estancia en Benin.

Muy contentos por la visita, nos han regalado una bolsa de “piment” y un pato.
De vuelta a Kpatalako, nos han dado de comer el habitual ñame pilado con pollo y salsa de cacahuete. La cerveza, no sabemos si estaría fría cuando ha llegado, pero tras la visita a Adogaba, estaba ya bastante calentita. También nos han dado para beber el tradicional shukutu.

De vuelta a la Misión, hemos disfrutado de un rato de reposo.
Por la tarde, hemos ido a visitar las huertas de Pelebina. Nuestras segundas huertas para mujeres. Ver crónica 2022.

Las comenzamos con la inercia de las huertas para mujeres de Bougou. Un grupo de mujeres de Pelebina nos solicitó un proyecto similar y las autoridades comprometieron un terreno parecido, también junto a la carretera. Las dos poblaciones están separadas por tan solo 5 km.

Eso, que podía parecer de entrada una desventaja, a la larga ha sido todo lo contrario. La sana competencia entre ellas y la costumbre de celebrar algunas fiestas como el 1° de mayo juntas, ha comportado avances para ambos proyectos.
En la actualidad, parece que Bougou ha cogido la delantera, gracias a la ampliación realizada con el segundo forage. En todo caso, está claro que las jóvenes vienen con fuerza,…



Personalmente me gusta mucho la huerta de Pelebina y su estupendo mango para las reuniones. Es un poco más agreste, con el terreno más desigual y quizá eso le da otro aire. El caso es que estos días están sufriendo la rotura del cable que daba corriente a la bomba del forage que les financiamos en 2021.

Por ello han realizado sus propias “perforaciones” para coger agua. El asunto es seguir adelante.
También estaban muy contentas y agradecidas por las microfinanzas. Nos han contado las representantes de cada uno de los cuatro grupos, que ha sido gracias a las microfinanzas que han podido desarrollar actividades que les han permitido asumir cargas familiares normalmente asignadas a los hombres pero que la situación general les impedía asumir a ellos.


Finalmente nos han agradecido la visita y nos hemos hecho una foto de grupo. Como en Bougou faltaban bastantes mujeres.

A última hora, hemos acudido al ensayo de la Coral de Jóvenes de Bougou. Estaban preparando la misa de mañana domingo. Lo hemos hecho para realizar una entrega más de las apreciadas camisetas de ACAMBI.

Para terminar hemos hecho una foto de grupo con la Coral.

Y mañana,… otro domingo tranquilo,… aunque es día de mercado. Veremos a ver cómo se desarrolla y procuraremos contarlo.