Las mujeres de Koundara

Hoy hemos continuado con los proyectos de promoción y del desarrollo a través de la mujer. En Koundara, nuestros proyectos son similares a los de Bongowerou y Sware. Aquí tambien financiamos “graneros de seguridad alimentaria”. Aquí las mujeres también tenían huerta y ahora buscan nuevas actividades que les puedan generar ingresos adicionales.

Koundara II, que es de donde son las mujeres con las que nos hemos reunido, esta cerca aunque con la población muy dispersa. Hemos tratado de visitar todas las viviendas de las familias participantes y hemos tenido que caminar tres kilometros según wikilok.

Nos hemos reunido, cómo no, bajo un mango frondoso y bastante fuera del village. Tras nuestro paseo, lo hemos entendido: no había lugar similar en las inmediaciones de las casas y hubiera supuesto tomar preferencia de una familia sobre las demás.

Les hemos contado nuestra pequeña historia y ellas nos han contado sus éxitos y sus problemas. Están muy contentas con los préstamos de seguridad alimentaria y hay más mujeres que quieren incorporarse al grupo. La inmensa mayoría son jóvenes y de tres etnias: viali, lokpa y pila-pila. Pese a ello se llevan muy bien y colaboran perfectamente.

Su sistema, es un poco diferente. Con el importe de los préstamos cada etnia compro grano barato, que luego vendió en la época en la que el grano es más escaso por la distancia a la cosecha. Con ese importe de la venta, pudieron trabajar más superficie y obtener una cosecha propia mucho mayor, al poder comprar semilla de mejor calidad y poder contratar a personas sin campo para que les ayudaran. Ese grano ahora lo tienen almacenado a la espera de que los precios suban.

El grano de las viali

Han cultivado soja y maíz. La soja tiene “intervenido” el precio por lo que ya no se espera que suba más. Por ello será lo primero que vendan. Con eso reembolsarán el préstamo recibido y los sacos de maíz serán sus ahorros y la garantía de que sus familias, podrán llegar sin problemas de comida, a la siguiente cosecha.

Nos han hablado también de su trabajo en la huerta. Quieren seguir, pero no tienen ya agua. Esperan poder tener una nueva bomba. La anterior daba agua salada y está arruinada. Además, el marigó (riachuelo), está seco.

Les hemos hablado de las cooperativas de mujeres que trabajan el carité en la Comuna de Nikki y que obtienen buenos ingresos por una actividad que es compatible con el campo o las huertas.

Durante nuestro paseo por las casas hemos visto que algunas mujeres hacían “shukutou”, una bebida local de baja graduación, que luego venden en los mercados. Mañana es día de mercado en Kpari y sin duda el shukutou de las viali, tendrá buena salida.

Hemos visto también durante el recorrido, cabritas, cerdos, pequeños huertos elevados,… se ve que tocan muchos “palos” para poder mejorar la situación de las familias. De hecho las hermanas han saludado a varios chicos y chicas que son alumnos de las escuelas y el instituto de Kpari.

Por la tarde, las hermanas han tenido catequesis con los más jóvenes hasta las 17:00.

Poco después, hemos comenzado con las cuentas de los proyectos realizados y con el debate de los proyectos a tratar de financiar en el 2023.

Proyectos de educación con la escuela PAEFFE y sobre todo con la promoción que se gradúa en junio. Nos piden apoyo para financiar el aprendizaje de oficios y para que puedan continuar en la secundaria. Proyectos de la escuela de pre escolar, ….

Por la noche cena especial de despedida. Como todas las comidas en esta misión, con un estupendo toque argentino.

Luego, maletas. Mañana es domingo de traslado. Nos vamos a Kalalé.

Como siempre la información que nos da Google está sesgada por el número de teléfonos móviles que viajan de un lugar a otro en moto. Al menos esa es mi teoría. Las motos son mucho más eficientes por aquí, sobre todo en las pistas de tierra y mañana tendremos al menos tres horas y media de pista de tierra, piedra y arena y otras dos y pico de asfalto. Os lo contaremos.

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