Hoy por la mañana hemos ido a visitar las obras del instituto de Peonga donde estamos financiando dos edificios cada uno con dos aulas.
Hace años ya les financiamos un edificio de aulas en el que únicamente tuvimos que terminar el trabajo que la asociación de padres de alumnos había comenzado pero que la llegada anticipada de la estación lluviosa había dejado en estado ruinoso. Lo inauguramos en 2011
De los dos edificios para los que comprometimos la financiación ya está ya muy avanzada la construcción del primero. En cualquier caso nos aseguran que los dos edificios y por tanto las cuatro aulas estarán listas para el comienzo del próximo curso. La aportación de la población en este caso es la madera, algo que es cada vez más valioso por la escasez y ya estaba apilada frente al edificio en construcción
Desde allí hemos intentado ir a Dunkassa. En el Instituto de esta población financiamos en 2018 el edificio para el laboratorio y la biblioteca. En la inauguración ellos se comprometieron a aportar una parte del equipamiento y nosotros comprometimos el resto. hoy hemos intentado llegar y nos hemos encontrado con la pista impracticable incluso para la Toyota. Sabemos que ya han cumplido su parte por lo que este próximo lunes les transferiremos la nuestra.
Nos hemos tenido que dar la vuelta para llegar hasta nuestro siguiente objetivo: la localidad de Bouka. Allí, en el “Instituto Alaine” hemos financiado varios edificios desde que comenzamos la colaboración en el 2008. El último fue en 2017 y la asociación de padres de alumnos se comprometió a pintar el edificio como aportación local,… pero el edificio sigue sin pintar,…
El edificio está en uso y cumpliendo su finalidad permitiendo que los jóvenes de la localidad estudien en condiciones dignas, pero no han cumplido su compromiso y no volveremos a atender ninguna petición hasta que lo cumplan. No nos lo podemos permitir. No somos un donante que hace regalos. En la fundación Alaine consideramos que nuestro papel es el de compartir el esfuerzo de las poblaciones locales. Puede que el porcentaje de financiación que pongamos nosotros sea mayor que el suyo, pero eso no quiere decir que estemos dispuestos a financiar el 100% de los proyectos, máxime cuando hemos pactado otra cosa. Aunque solo sea por respeto a las poblaciones que hacen un esfuerzo para conseguir poner su parte debemos mantenernos firmes y no dar nuestro brazo a torcer.
Hemos acabado la jornada en la misión de Bouka con otras dos contrapartes. Los misioneros Père Jesús y Père Ángel.