En la región del Donga donde nos planteamos el proyecto, existe además una incipiente actividad de pequeños negocios individuales de venta ambulante o en mercados locales más o menos organizados. En esta zona la etnia dominante es la etnia Taneka.
La producción de electricidad se reduce a la presa de Nangbeto (compartida con Togo), que resulta insuficiente para el sur del país. En el norte la ausencia de electricidad es la norma. La mayoría de la población vive de una agricultura de subsistencia y del pequeño comercio.
La educación constituye uno de los retos más importantes. La tasa de analfabetismo está en el 37% ocupando el puesto 167 sobre 179 países. A comienzos de la década de los noventa solo 471.000 alumnos asistieron a la escuela primaria cada año y unos 97.000 en las escuelas secundarias. La educación superior afecta a más de 10.000 estudiantes en la Universidad Nacional de Benin en Cotonou.
El nivel de escolarización infantil no llega al 35% como dato promedio del país y es sensiblemente menor en la zona en la que se propone actuar. Benin es, además, el país que tiene la mayor brecha de escolarización entre chicas y chicos, de todo el mundo (Anexo I – Worldmapper). Por todo ello, la Fundación Alaine viene financiando Centros Educativos de Primaria, Secundaria y Formación Profesional desde el inicio de su actividad en el País.
Aunque la situación va cambiando progresivamente, ha existido tradicionalmente una resistencia a la escolarización derivada de la pronta incorporación al trabajo de los niños y niñas en Benin. Desde muy temprana edad las niñas en las tareas domésticas y los niños en el campo desempeñan arduas jornadas laborales que les mantienen lejos de las escuelas. En los últimos años se está produciendo una progresiva incorporación de la infancia a las Escuelas hasta ver desbordada la capacidad existente. El estado Beninnés, está dedicando el 31% del P.I.B., a la Educación, pero aún así no resulta suficiente. Nuevamente resaltar que casi el 50% de la población es menor de 14 años.Las comunicaciones en el país, son complejas. La mayoría de las poblaciones están unidas únicamente por pistas de "laterita".
La región
del Donga sólo cuenta con dos carreteras pavimentadas en toda su extensión: la que llega de We we hacia Tanguietá y la que sube desde el sur atravesando Djougou. (Plano en la página siguiente). En la actualidad se está terminando de pavimentar la que recorre la región de este a oeste. En todo caso debido a la escasa concentración de cemento aplicada, y al reducido grosor de la capa administrada, los baches complican rápidamente la circulación una vez concluidas las obras.
Donga es uno de los 12 Departamentos en los que está dividido Benin. Su capital es Djougou. Está situado al noroeste del país, en la frontera con Togo. Tiene 10.691 km2 de superficie y una población de unos 400.000. La densidad poblacional es de 37 habitantes. Aproximadamente la mitad que el promedio del país.
En los cuatro Departamentos del norte ( Donga, Borgou, Atakora y Alibori), los datos promedio referidos a la totalidad del país, empeoran notablemente, constituyendo una zona de urgente actuación.
La Fundación Alaine, se propone conseguir la financiación necesaria para construir un edificio para una Escuela de Educación Primaria en Bougou. Contará con 4 aulas y una biblioteca. Todo ello en el Área de Djougou, zona de actuación de la Misión TANEKA responsable de una gran parte del Departamento de Donga, al norte de Benin, en el África sub-sahariana.
La iniciativa que se plantea, parte como en ocasiones anteriores de la experiencia de nuestra contraparte local en Benin: La Sociedad de Misiones Africanas. Se trata de un Instituto Misionero que se lleva en África 152 años. Se acompaña Memoria de sus actuaciones en la Zona de la propuesta.
En la actualidad, resulta urgente invertir en dotar a la zona planteada, de la infraestructura necesaria que les permita una adecuada escolarización que haga factible que se pueda mejorar el futuro de los niños, saliendo de la tenaz espiral de pobreza en la que se encuentran inmersos. Existen otras Escuelas en la zona, pero absolutamente desbordadas y sin las dotaciones propuestas. Por tanto, a la vista de que:
Existe voluntad de escolarización suficiente y demostrada que justifica la inversión en nuevas aulas.
Es necesario que los jóvenes benineses se vayan preparando ante el reto de conseguir el desarrollo local.
No existe, en la zona en la que se plantea la inversión, ninguna biblioteca infantil,
Desde la Fundación Alaine se decide acometer la inversión necesaria procediendo a la búsqueda de la financiación precisa.
La infraestructura detallada anteriormente, dará cabida a la escolarización de 200 niños y niñas. Las instalaciones de biblioteca quedarán, adicionalmente a disposición de los niños y niñas de otras Escuelas de la zona.